Sé parte del juego con Samsung TV

El consumidor latinoamericano es devoto del fútbol. Está en nuestra sangre: crecimos viendo en la televisión a nuestro equipo favorito, los niños jugando a la pelota en la calle, nos reunimos con los familiares para ver el partido decisivo de nuestro equipo el domingo por la tarde, creando todo un evento.

El año pasado, durante la Copa del Mundo, la mayor proporción de potenciales espectadores se alcanzó en América del Sur (96,6%), la más alta durante un campeonato según la FIFA. Además, 9 de los 10 principales territorios, en término de porcentaje de la población alcanzada, fueron en América del sur y Europa, todos los cuales tenían a sus selecciones compitiendo en el campeonato.

Según Kantarlboe, Brasil fue el país con mayor audiencia en promedio para el Mundial de Rusia 2018. Con un promedio de 31.04 puntos de audiencia, el país carioca fue el único que alcanzó esa gran cantidad de televidentes, seguido por Panamá con 28.81 puntos y Chile con 26.54 -números que prueban el amor que sentimos por el fútbol-. Para Samsung, el incremento en las ventas comienza un par de meses antes del campeonato: la venta de TV aumenta un 49% durante este periodo.

Para ofrecer una exquisita experiencia para el consumidor, Samsung ofrece el QLED 8K, para aquellos que les gusta seguir cada uno de los movimientos de los jugadores durante el encuentro. Con resolución de 33 millones de pixeles, el televidente puede disfrutar de la mayor calidad de imagen, y sentirse como si estuviera dentro del campo de juego.

Si la meta es sentir la emoción del estadio, la Super Big TV con 82” es la mejor opción. La TV cabe en una pieza de 3.5m, y le entrega al espectador la mejor experiencia sin abandonar su living.

Un punto importante sobre las TVs QLED, es su procesador Quantum 8K, que hace uso de la inteligencia artificial (IA) para mejorar la calidad de imagen. Cuando el contenido no está en 8K, el procesador analiza en tiempo real la database con millones de imágenes en alta y baja definición, y los usa como una referencia para clarificar cualquier contenido, transformándolas, independiente de su fuente nativa (HD, FHD, UHD,  y otras), en una calidad cercana a los 8K.